Patricio Pérez Pacheco Profesor de Intervención Sociocomunitaria “Reducir el número de escolares por aula es una medida básica para ofrecer calidad, atención y bienestar”

Patricio Pérez Pacheco, gaditano, de Jerez de la Frontera, profesor de Secundaria de la especialidad de Intervención Sociocomunitaria y maestro de inglés de Educación Primaria, además de delegado sindical de La Federación de Enseñanza de CCOO de Andalucía, es uno de los docentes, del grupo de 19 expertos y expertas de otros tantos países europeos, que han superado una selección para trabajar en una propuesta que ayude a mejorar el bienestar en la escuela, tanto del profesorado como del alumnado. Las personas componentes de este grupo de trabajo han sido seleccionadas a título individual, teniendo en cuenta su trayectoria profesional. Sus trabajos comenzaron el pasado mes de marzo. Entre los expertos y expertas se encuentran investigadores, académicos, docentes, direcciones de centros educativos, psicólogos, trabajadores sociales o médicos, de Países Bajos, Letonia, Alemania, Malta, Italia, Lituania, Suecia, Bélgica, Hungría, Polonia, Rumanía, Grecia, Ir- landa, Croacia, Portugal, Islandia, Chipre, Francia y España.

¿Cuál es el objetivo de este grupo de trabajo y de quién depende?

El grupo de trabajo se crea con el objetivo de asesorar a la Dirección General de Educación, Juventud, Deporte y Cultura de la Comisión de la UE para la elaboración de políticas que promocionen entornos de aprendizaje favorables entre los países miembros. En concreto se pretende ofrecer pautas y herramientas que incidan en el bienestar escolar, incluida la salud mental del alumnado, del profesorado y del personal educativo, que ayuden a la elaboración de propuestas para implementar reformas políticas en línea con el Espacio Europeo de Educación.

 ¿Este grupo de trabajo se ha creado para un fin concreto y para un tiempo limitado o tendrá un recorrido, en el tiempo, más largo?

Las distintas comisiones de la Unión Europea, cuando elaboran recomendaciones para sus países miembros, se asesoran, entre otros medios, de grupos de expertos. Este es el caso de este grupo sobre bienestar escolar y salud mental en el sistema educativo.

La duración de este grupo de trabajo es de 15 meses. En concreto, comenzamos nuestro trabajo a finales de marzo de este año a través de reuniones presenciales en Bruselas, especialmente para puestas en común, y reuniones online de grupos internos en que hemos estructurado el trabajo. Se trabaja por pares de modo que todos los integrantes participamos en las propuestas que cada uno de estos subgrupos elaboramos.

 ¿Esta preocupación por el bienestar escolar es una no- vedad o tiene precedentes en Europa?

El bienestar escolar y la salud mental, es una preocupación cada vez mayor en Europa. De hecho, la necesidad de crear recomendaciones nace a raíz de anteriores grupos de expertos que analizaron aspectos relacionados con la inclusión educativa o el éxito escolar y que consideraron la necesidad de avanzar en estas cuestiones. Algunos países, caso de España, han dado sus primeros pasos en bienestar escolar y salud mental (que no debe confundirse con problemas de salud mental) incluyendo a docentes, especialmente de orientación, aunque el personal asignado es preocupantemente insuficiente. Son inicios tibios, testimoniales y muy lejanos de lo que necesita el sistema educativo. Es grave, por ejemplo, que el suicidio sea la segunda causa de muerte entre población adolescente en España o que los niveles de acoso escolar y ciberacoso se estén disparando, especialmente estos últimos, entre menores y adolescentes. Queda mucho que avanzar para que el sistema educativo en Europa de res- puesta efectiva a estos problemas.

 ¿Cuáles considera que son aquellos elementos imprescindibles para construir un entorno escolar saludable, tanto para el alumnado como para el profesorado?

Sobre esta cuestión se está trabajando en este grupo de trabajo. De hecho, hay aspectos que se están valorando como fundamentales, tales como la educación emocional, el apoyo a escolares con necesidades de aprendizaje, la formación y apoyo integral al profesorado y al personal educativo, abordándose cuestiones específicas en aspectos, entre otros, de género o de orientación sexual, incluyéndose el ciberacoso o el acoso sexual. En Europa hay aspectos coincidentes que están dificultando un entorno saludable como son no disponer de una ratio adecuada para poder atender a todo el alum- nado con calidad o no considerar el bienestar escolar (del alumnado, profesorado y otros profesionales) como eje central del proceso educativo.

 ¿La pandemia de la COVID 19 nos ha hecho reflexionar sobre la necesidad de mejores entornos vitales y de trabajo?

Por supuesto. De hecho, no es baladí que la necesidad de elaborar una directriz europea sobre bienestar y salud mental en los centros educativos se haya planteado tras la pandemia que hemos vivido. Más allá de la incidencia que ha tenido en el rendimiento curricular, la pandemia ha afectado al bien- estar y a la salud del alumnado y del profesorado. Este problema que ya empezaba a ser preocupante, se ha disparado.

 ¿Cree que esta reflexión se ha traducido en medidas, positivas, de impacto sobre los sistemas educativos europeos, y en concreto sobre el español?

Resulta preocupante que los sistemas educativos europeos, en líneas generales, no han hecho un uso positivo de los efectos de la pandemia y que supusieron un incremento de los recursos, especialmente humanos, en los centros educativos. Superada la pandemia, muchos de los refuerzos disponibles, como profesorado de apoyo, desdobles de unidades, entre otros, han desaparecido. No hemos aprendido de lo positivo que supone la reducción de la ratio en las aulas para conocer los entresijos de las relaciones humanas entre el alumnado y con el profesorado, por ejemplo, o cómo reducir el número de escolares por aula es una medida básica para ofrecer calidad, atención y por tanto bienestar. La educación se sigue midiendo con parámetros economicistas y no teniendo en cuenta el bienestar de todos los agentes que intervienen en ella.

¿Las propuestas de la comisión de expertos serán recomendaciones para los países miembros de la UE o serán vinculantes en su cumplimiento?

Las competencias en educación corresponden a los gobiernos de los países miembros por lo que las directrices que se elaboren sólo podrán ser recomendaciones. Desde el grupo de expertos estamos trabajando para que el documento que finalmente se elabore sea la base del texto que, aunque sólo como recomendaciones, incluya medidas que sean seguidas por todos los países. Debemos tener en cuenta que las recomendaciones deben entenderse como una interpretación sobre el contenido del Derecho de la UE. En cualquier caso, estas recomendaciones serán un instrumento no sólo práctico, sino reivindicativo en cada uno de los países de la UE.

En cualquier caso, ¿qué impacto cree que tendrán en el entorno escolar español?

Resulta fundamental que las medidas que se planteen sean consideradas como necesarias por los distintos gobiernos, central y autonómicos en España. Las medidas que se incluyan deben ser una meta a alcanzar por los países miembros por lo que debe considerarse como un instrumento que fuerce a aplicarlas para mejorar el bienestar y salud mental en los centros educativos. Siempre tendrá un impacto posi- tivo si bien será necesario demandar que se apliquen con la urgencia que esta cuestión requiere.

Salud mental de docentes y alumnado, cuidados de la infancia, atención prioritaria al medio ambiente, ámbitos de convivencia, etc. ¿Cree que nuestro sistema educativo está preparado para incorporar y gestionar en su día a día todos estos elementos que, se nos antojan necesarios, a la hora de construir entornos escolares saludables?

No como está organizado y estructurado el día a día de nuestros centros educativos. De ello que este grupo de expertos esté trabajando para que sus propuestas sirvan de eje central de los sistemas educativos europeos. El grupo de expertos tiene absoluta libertad para que el documento recoja todas sus consideraciones y propuestas, aunque deberá ser la propia UE la que apruebe las recomendaciones finales. Puedo avanzar que estas se están centrado en la formación del profesorado sobre el bienestar escolar, y sobre el que debe girar el sistema educativo, en la reducción de la ratio, en recursos para atender las necesidades específicas de todo el alumnado diverso del sistema educativo, en la dignificación y me- jora de las condiciones laborales y de la promoción profesional del profesorado, en la reducción de la carga administrativa, en la inclusión de otros profesionales que apoyen la labor docente o en la participación de las familias en el pro- ceso educativo, entre otra medidas. Estos son realmente algunos de los principales elementos que inciden en la mejora del bienestar y la salud mental del alumnado y del profesorado de los centros educativos.

¿Qué deberían de aportar las familias a la implementación de este proyecto? ¿Y las organizaciones sindicales?

Las familias son un elemento central en el bienestar escolar. Un reto a lograr es que estas participen activamente en los centros educativos. El bienestar escolar, del alumnado e incluso del profesorado, depende en cierta medida de ello, aunque no sólo. Este proyecto está trabajando para que las familias sean consideradas como un agente positivo en este bienestar escolar.

El documento final que se apruebe por la UE teniendo en cuenta nuestras propuestas como grupo de expertos, debe ser un instrumento de exigencia y reivindicación de las organizaciones sindicales. Porque muchas de las medidas que se están analizando, son reivindicaciones que se vienen demandando sindicalmente. Ahora quedarían reforzadas muchas de ellas.

 ¿Cómo se organiza uno el dia a día con tanta tarea como se adivina de su actividad?

Actualmente el profesorado sólo logra avanzar destinando tiempo personal en su labor como docente lo que conlleva un coste personal y que la profesión docente sea cada vez menos atractiva. La dignificación de la actividad docente, el reconocimiento de su actividad, incluido su salario que en muchos países europeos es realmente bajo, la asignación de carga horaria, es fundamental para la mejora del bienestar escolar.

Existe una relación beneficiosa entre la salud mental de los docentes y la de los estudiantes. Para que los docentes puedan fomentar eficazmente el bienestar y la salud mental de sus estudiantes, es crucial que ellos mismos experimenten el bienestar y una buena salud mental.